BUEN HÁBITO
“Ir al gimnasio porque se acerca el verano y uno quiere verse bien es una premisa que debe ser desterrada para siempre”, dice el entrenador personal Mario Vidaurre. Lo ideal, según el especialista, es ejercitarse todo el año para gozar plenamente de los beneficios de esta práctica.
TRABAJO SISTEMÁTICO
El entrenamiento está diseñado para realizarse de manera ordenada. Según Vidaurre, hay tres principios básicos que deben respetarse: de lo básico a lo complejo, de lo poco a lo mucho y de lo conocido a lo desconocido. Asimismo, la adaptación es un proceso clave para lograr resultados óptimos. Se debe aumentar la carga del ejercicio de manera gradual y monitoreada, a fin de evitar consecuencias negativas.
INDIVIDUALIDAD
“No existen las formulas milagrosas. Olvídate de copiar la rutina que leíste en una revista o que te recomendó tu amigo”, señala Vidaurre. El entrenamiento está en función de las características específicas de cada persona. Esto también debe aplicarse en el factor nutrición. “Jamás copie la dieta de otra persona, y tampoco siga las dietas de moda”, agrega.
SALUD
Lo aconsejable es tener paciencia y no recurrir a métodos que puedan poner en riesgo la salud. “Muchas veces, el principiante se ve tentado a tomar atajos. Sin embargo, aquello que llega rápido se irá rápido, dejándonos una serie de secuelas”, afirma el entrenador.
DURACIÓN
Según el experto, es mejor empezar con una rutina de 3 sesiones semanales. Cada una debe durar una hora como máximo. No hay por qué esforzarse innecesariamente. Además, el proceso de descanso es vital.
PACIENCIA
Hay que prestarle atención a la técnica de ejecución más que a la carga que está trabajando. No se apure ni se desespere. Los resultados llegarán en su debido momento.
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